Tus límites

Presos por el que dirán,
atado por el no podrás,
los estigmas puedes dejar atrás,
salir a la calle y construir tu realidad.

Los límites los ponen los prejuicios de la sociedad,
los barrotes de tu mente encerrada con su compañera Soledad,
las miradas anónimas llenas de gravedad,
y tras de ellas aparece el miedo de tu cerebro a la novedad.

Los límites son sólo opiniones,
pesadas envidias cargadas de difamaciones,
son los días que amaneces abrazado a tus bajones,
son humo disfrazado de falsas percepciones.

Los límites son hilos imaginarios,
tejidos por aquellos que tienen miedo a verse superados,
teñidos año tras año de los colores de mil excusas,
retales de recuerdos deshilachados de tus viejas musas.

Los límites son la farsa del dinero,
poderoso caballero que remueve egos por el mundo entero,
los límites son las cuatro paredes de plomo de una mente,
de tu mente,
la que permanentemente habla y constantemente miente.